Cigarreras

1852

En 1845 Prosper Mérimée publicó en París una novelita, titulada Carmen, que gozó de gran éxito; pero aún más lo tuvo su adaptación operística, treinta años después, con libreto de Meilhac y Hávely y música de Georges Bizet. Quedaba así consagrada la cigarrera como «tipo universal», aunque es lícito preguntarse cómo esta temprana representante del proletariado industrial pudo alcanzar tal preeminencia.